No siempre es fácil decidirse...Desde que llegué a La Sierra me cayó bien el mercadillo de antigüedades del pueblo de Navacerrada.
La primera vez que preguntamos en uno de los puestos ambulantes nos aseguraron que los puestos se colocaban sí o sí, que aquello se montaba "todos los domingos del año, llueva, nieve o haga calor..."
Y a fe mía que es cierto, que debido a mi cercanía con el pueblo, hemos pasado por allí con todo tipo de condiciones climatológicas y siempre están allí, parece que aparte de vender la mercancía, hay que sacarla a tomar el aire.
Es gracioso ver todo lo que allí se vende, o cambia de manos, podría decirse, ya que aparte de muebles antiguos, se enseñan artículos de lo más variopinto: botellas de gaseosa de cristal, llaves oxidadas de casa de pueblo, ruedas de carro de pueblo, trillas, puertas de madera de casa de pueblo, muchas de las cosas tienen que ver con el pueblo...
Siempre he pensado que si tuviera casa en el campo o montase una casa rural, enseguida pasaría por aquí para comprar montones de cosillas y darle un toque rural.
Todo aquel que se considere nostálgico le gustará pasar por aquí: hay coches de Scalextric antiguos, maquetas, juguetes de madera - mucha madera - vieja, o nueva para pintar al gusto, relojes de cadena, discos de vinilo, libros, antigüedades en general, lo que no quiere decir que sean muy valiosas, al menos no en un sentido monetario.
También hay lienzos (cuadros), aún recuerdo el dia que mi niña empezó a "pasear" por encima de la exposición de un vendedor:
- ¡Mira papá, cuadros!
Debían de ser buenos, si no, no sé cómo aguantaron el peso de una niña de 3 años
En fin, un buen plan para todo dominguero que se precie, y no quiera malgastar sus fuerzas pateando por la Sierra, puede ser pasar por el rastrillo, comprar o mirar, y pasarse luego por la Plaza de Navacerrada, sentarse en una de las terrazas, pedirse unos torreznos, y a tomar el sol...
