28 abril 2008

Evora


Evora, a medio camino entre Badajoz y Lisboa (unos 100 kms. desde Badajoz) pudiera pasar desapercibido si uno va pensando solamente en la capital portuguesa, pero si vamos sin prisa, merece la pena pasar, no ya un ratito, sino hasta el día entero por este pueblo.
Algunas fotos:
http://picasaweb.google.com/josemartinalv/Evora

Recomendable la catedral, de original románico, pero reconstruida en estilo gótico en el s.XV; por cierto, nunca ví una catedral en la que te dejaran hacer tantas fotos, a libre albedrío, que diría el otro, hasta con flash. Todo aquel con réflex o compacta acabó con la batería echando humo...
En la parte opuesta del pueblo, restos de un templo griego: ¿qué c.. hace esto por estas latitudes?
No perderse los bollos de la panadería de la plaza: fuimos a desayunar, a tomar el aperitivo, y a merendar al mismo sitio, sólo por las tartaletas, las napolitanas dulces y saladas, si te gusta el café, dicen que el portugués es bueno, yo diría que algo te deja "suelto" cual José Coronado, pero bien .


Los portugueses, ya se sabe, aunque al principio hablan como raro, al irte de allí ya les has cogido el truco, y medio en broma medio en serio hablas con ellos hasta con acento.

3 comentarios:

yago dijo...

Recuerdo que ya me habías hablado de este pueblo y que estaba muy bien. Molan las fotos y la que más la que has puesto en la entrada con esa luz "extraña" ¿retocada tal vez? je,je,je,...
Habrá que ir a conocerlo si paso cerca alguna vez

víctor dijo...

Hace como diez años estuve en el precioso lugar que recomiendas. Fui con mi amigo Víctor, un verano en el que nos dirigimos hacia Portugal sin rumbo fijo ni reservas. No es que recuerde demasiado pues en aquella epoca nos tiraban más las bebidas típicas que las viandas,(ahora mataría por uno de esos bollos), y hasta tal punto debio ser el desenfreno que yo recordaba Evora por el lugar donde perdí un día de vida inconsciente y vomitoso, más o menos como el individuo de la preciosa foto de la escalera. ¡Unas fotos muy buenas Dou!

josemartin dijo...

Gracias sr victor:
Como bien dices, si hubiera pasado por allí años atrás hubiera llevado otro tipo de mochila, o probado otros liquidos elementos aparte del café con carajillo, pero esta vez si llevaba mochila, era la de la peque, que encima hacía poco que sabía andar. Nunca me dolió tanto la espalda! ni deseé tanto medir 1,50! de tener que llevarla de la mano todo el día.
Aparte de eso, bueno, bonito y barato.